jueves, 2 de febrero de 2017

Amor en suspenso

Hoy he oído tu nombre y me he girado ansiosa por si te veía,
pero el que contestaba no tenía tú voz.
He pensado en todo lo que podría decirte mirando tus ojos si estuvieras aquí conmigo y no alguien que ha usurpado tu nombre.
Y es que duele cada hora que no te tengo a mi lado,
porque ahora aunque nuestros cuerpos accidentalmente se crucen, 
se rocen o nuestras miradas se acaricien, 
nosotros ya nos habremos alejado.
Porque buscando la luz al final del túnel donde me hallo perdida, 
opté por el atajo del sentido común, 
el que decía ser viable para mi salud, 
ese que extendía un certificado de defunción firmado co(n) razón,
dejando de latir dentro de mí ese algo que llenaste, 
prometiéndome 1001 cosas que compartir entre sueños e ilusión, 
ilusión que te llevaste...
El Rastro (Madrid)
He pasado mis días creyendo que nuestro amor sólo estaba en suspenso, colgado del cielo que fue nuestro testigo en noches de anhelo, donde como toro desbocado buscabas tu luna entre mis lunares y me regalabas canciones en las que identificarme, sin importar el paso de las horas...
Hoy me cuesta imaginarte, y sólo quedan huellas de lo que pudo haber sido, en el cristal frágil en el que me he convertido y desde donde tanto me he visto llorarte. 

2 comentarios:

  1. Bueno, amiga, bello y triste poema o reflexión. Pero, pjo, sorpresas da la vida sobre esto. Hay pavesas que en su estado de letargo cruzan océanos de tiempo.

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    1. Los sentimientos son traicioneros, el cuidado no hay que perderlo. Gracias siempre Balbina, me encantan tus visitas.

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